Steve Case no puede estar fuera del mundo de los negocios por mucho tiempo, y menos aún no dejar su huella como modelo de cambios, especialmente en lo que respecta a Internet como forma de comunicación y entretenimiento.
Lo cierto es que actualmente está en miras de obtener los mismos resultados en el sector de salud online a través de RevolutionHealth como en su momento lo hizo con America On Line (AOL), la que posteriormente se fusionó con Time Warner.
Hace unos años su fortuna personal se calculaba en 1.500 millones de dólares. Pero a pesar de eso, debió dar un paso al costado y dejar la presidencia de AOL Time Warner. Pero esto que terminó con su renuncia, se había iniciado varios años antes, cuando AOL aún estaba libre de las garras de Time Warner, e incluso mucho antes.
Todo comenzó en 1958, año en que nació Stephen McDonnell Case en Honolulu, Hawai, donde pasó su infancia. Tras varias iniciativas personales, como la que realizó con su hermano al crear Case Enterprises (vendían de todo, desde semillas y tarjetas por correo o puerta a puerta) y su papel como editor de revistas durante el secundario, su verdadera carrera arrancó cuando, con un título universitario de Ciencias Políticas obtenido en la Universidad de Massachussets bajo el brazo, ingresó como Director de Marketing en Procter & Gamble y luego en Pizza Hut, dos empresas de primera marca que lograron esa imagen gracias a su performance.
Dicen que por ese entonces incluso presentó su currículum a Gerald Levin, a cargo de HBO, integrante de Time Warner, y quien posteriormente presidiría el grupo, justo cuando se unió a AOL. Pero que en ese momento no lo tuvo en cuenta.
El mundo tecnológico ocupó un lugar importante en su vida a partir de 1983, cuando entró al sector de marketing de la compañía de videojuegos Atari, la que dos años después, y por su iniciativa, comenzaría a llamarse Quantum Computers, adoptando también un perfil diferente, esta vez como proveedor de servicios online para usuarios de Comodore.
El paso gigante fue motivado cuando Apple, tras un negocio en el que había participado con Case y la compañía Tandy potenciando los servicios online con el lanzamiento de Apple Link y PC Link –llegaron a tener 75.000 usuarios-, decidió dar un paso al costado. Con 2,5 millones de dólares pagados por Apple en el bolsillo, en 1991 se centró en su empresa y lo primero que hizo fue cambiarle el nombre: así nació America On Line.
La transformación de AOL
Se puede decir que AOL se convirtió en la mayor compañía de Internet (ya antes de su fusión con Time Warner) gracias a la perspicacia y al poder ver más allá de lo inmediato de Steve Case.
Con 200.000 suscriptores, al principio AOL sólo les brindaba a ellos sus servicios de noticias y entretenimientos. Pero la mirada de Case vio que no estaba ahí el negocio y ya como director general, decidió que las puertas de AOL fuesen abiertas a todos los usuarios de la red. A partir de ahí creció tanto en tan poco tiempo que ningún sitio podría competir con él y se convirtió en el mayor proveedor de Internet del mundo.
Posteriormente comenzó el binomio compra y alianza. La primera, al hacerse cargo de Compuserve y Netscape. El segundo, en el 2000, al fusionarse con Time Warner –propietario de otros grandes como CNN, Warner BROS., People, Fortune, Time y HBO, entre otros-, dando origen así a AOL Time Warner, un gigante en todos los sentidos, del que AOL poseía el 55% de las acciones. O como lo describió el mismo Case: “Un medio global que sea tan central en las vidas de las personas como el teléfono o la televisión… e incluso más valioso”.
Pero, la participación de Steve Case en el mayor conglomerado mediático no duró demasiado. En 2003, tras tres años de haberse llevado adelante la mayor fusión de la historia –se hablaban de 100.000 millones de dólares-, decidió renunciar a la presidencia de AOL Time Warner. Si bien no era lo que quería hacer, los enfrentamientos con los accionistas, entre los que se incluía al magnate Ted Turner, fundador de CNN, que lo culpaban de haber hecho que se desvalorizara en la Bolsa la compañía, ya no daban para más.
El mismo Case aseguró que: “Esta decisión ha sido personalmente muy difícil para mi… me gustaría seguir trabajando como director de este gran compañía durante muchos años más”. Incluso Gerald Levin había renunciado el año anterior, al igual que otros directivos.
Ahora todo vuelve a girar en torno a Steve Case. Tras unos años fuera del mercado, en donde estuvo viendo cuál sería su próxima jugada, apareció con RevolutionHealth, la que pretende convertir en un gigante de la salud, un campo en Internet que aún está en pañales.
Un dato fundamental de todo esto es que este visionario siempre tuvo esa cualidad, su visión, tanto del mundo como de las necesidades del consumidor. Una visión que permitió percibir en lo que se convertiría Internet y en ser justamente él uno de los que propiciaran dicha conversión.
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